Description

La col lombarda, también llamada col roja o morada, es un repollo comestible de sabor ligeramente dulce y muy apreciado, que se caracteriza por el atractivo de su color morado, magenta o púrpura oscuro de sus hojas.

Es una variedad seleccionada de la col común cultivada en toda Europa y disponible durante todo el año. Se cultiva, prepara y consume de la misma manera que las otras coles.

La col lombarda una de las variedades de verdura más ricas en selenio, el cual disminuye la presión arterial, aporta oxígeno al tejido muscular, produce anticuerpos, desintoxica de los metales pesados, previene de la esterilidad y activa el tiroides. La lombarda es pectoral y está indicada en la tisis y las pleuresías.

El fruto

La col lombarda (Brassica oleracea, var. capitata), también llamada col roja o morada, es un repollo comestible de sabor ligeramente dulce y muy apreciado, que se caracteriza por el atractivo de su color morado, magenta o púrpura oscuro de sus hojas.

Es una variedad seleccionada de la col común cultivada en toda Europa y disponible durante todo el año. Se cultiva, prepara y consume de la misma manera que las otras coles. La principal diferencia es que la col lombarda contiene pigmentos de antocianos responsables de su coloración y que se pierden durante la cocción, aunque se mantienen bien en conserva.

Las hojas se superponen apretadamente formando el repollo, que puede tener forma achatada, cilíndrica, esférica u ovalada. Generalmente son repollos de hojas lisas, de forma redondeada y tamaño medio, de precocidad intermedia a tardía y que se emplean generalmente frescos o cocidos.

Normalmente se cuece y resulta muy buen ingrediente para diversos platos. Las variedades redondas e intensamente coloreadas se emplean generalmente para encurtidos. También se pueden servir una vez cocidas lentamente en agua, opcionalmente condimentada. En muchos países, es tradicional que la lombarda cocida forme parte del menú de Navidad. En Madrid mismo, se ha convertido en uno de los símbolos gastronómicos de la Navidad, privilegio que hace que su precio se dispare cuando llegan estas fechas.

Se componen fundamentalmente de agua aunque se consideran muy nutritivas por la cantidad de vitaminas y minerales que contienen. Presentan muy bajo aporte calórico (18-21,78 kcal por 100 g de producto fresco) por lo que se pueden incluir en dietas hipocalóricas. Consumida cruda o en ensalada constituye una importante fuente de vitamina C para el organismo.

Su conservación en el cajón de las verduras del frigorífico y envueltas en una bolsa de plástico perforado es el modo más adecuado para mantenerse en perfecto estado en el hogar durante 2-3 semanas.

Estacionalidad de la col lombarda

Las coles lombarda se encuentran en el mercado durante todo el año pues su cultivo es posible gracias a las diversas variedades que se han conseguido. Son unas verduras muy apreciadas en invierno dado que su uso es muy habitual en el preparado de comidas típicas de esta época del año.

Valoración nutricional

La col lombarda se cultiva, prepara y consume de la misma forma que las coles verdes. La principal diferencia es que la col lombarda contiene pigmentos del flavonoide antocianina. Éstos se pierden durante el proceso de cocción, aunque se mantienen bien si el producto está en conserva. Contiene vitamina C y es una fuente de fibra. La vitamina C es un potente antioxidante que ayuda a proteger contra varios tipos de cáncer e intensifica las funciones inmunológicas. La investigación muestra que el consumo de fibra brinda protección contra una serie de trastornos del tubo digestivo, incluyendo el cáncer de intestino. Entre los muchos componentes menores presentes en las frutas y hortalizas existen los flavonoides, los cuales, en una dieta variada, pueden dar protección contra el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.